En este post abordamos las diferentes partes de las que se compone una farola de alumbrado público. Para ello lo primero que tenemos que hacer es diferenciar qué es una lámpara, una luminaria y una farola, según se denominan en la iluminación profesional.
Cuáles son las partes de una farola
Lámpara
Una lámpara es el elemento que emite luz. Coloquialmente se denomina también bombilla. Las lámparas para alumbrado público más habituales son las LED y las de gas a alta presión o de descarga, denominadas HID (High Intensity Discharge en inglés), y que suelen ser de vapor de mercurio, vapor de sodio o de halogenuros metálicos.
Luminaria
Una luminaria es el aparato que alberga en su interior una o varias lámparas y que contiene todos los componentes necesarios para su conexión eléctrica, encendido y la correcta distribución lumínica.
Farola
Una farola es el conjunto de elementos que permiten ubicar la luminaria en su lugar óptimo de funcionamiento y que suele estar compuesta de una base, una columna, uno o varios brazos y de una o varias luminarias. Una farola también es denominada en el ámbito de la iluminación profesional como un conjunto.
A continuación detallamos toda la información sobre las farolas de alumbrado público; cuáles son sus partes, qué clases de farolas urbanas existen y los tipos de instalación más comunes, ¡sigue leyendo!
Sumario
Como hemos visto una farola y una luminaria son dos elementos diferentes, aunque es muy frecuente mezclarlos entre si. Veamos las partes de que se compone cada una de ellas:
Partes de una farola
A. Base. Algunas farolas tienen una base o pedestal con un diseño específico, diferente al del poste. Suelen utilizar base las farolas de diseño clásico, emplazadas en los cascos históricos de las ciudades.
B. Columna. También llamada báculo, poste o soporte. Las columnas son los elementos que soportan y sujetan las luminarias. Pueden ir directamente ancladas al suelo o unidas a una base y por su interior pasan los cables de alimentación eléctrica hasta la luminaria. Se fabrican en longitudes variables, dependiendo de la altura de instalación necesaria para cada luminaria.
C. Brazo. Un brazo es una estructura de longitud variable, generalmente metálica, que se utiliza para ubicar la luminaria en su punto de trabajo óptimo cuando este se encuentra alejado de la columna.
D. Luminaria. Es cada uno de los aparatos de iluminación que se instalan en una farola.
Partes de una luminaria
E. Carcasa. Fabricada de un material rígido y resistente, habitualmente en metal, sirve para alojar en su interior todos los componentes de iluminación y protegerlos de agentes exteriores, como son impactos, agua, polvo, etc.
F. Equipo electrónico. Es el conjunto de elementos electrónicos necesarios para la conexión de la lámpara a la corriente eléctrica, su encendido y su correcto funcionamiento. Dependiendo del tipo de tecnología que utilice la luminaria necesitará unos u otros, siendo los más habituales un arrancador, fusibles, un balasto o transformador, un condensador, etc.
G. Reflector. El reflector se utiliza para dirigir la luz que emite una lámpara desde una dirección no deseada hacia la dirección donde se necesita, mediante la reflexión de los haces de luz en una superficie pulida.
H. Fuente de luz. Se denomina fuente de luz a la lámpara emisora de luz que utiliza la luminaria. Puede ser LED, de vapor de mercurio, vapor de sodio o halogenuros metálicos.
I. Cierre o difusor. Es un elemento transparente o translúcido, generalmente de cristal o policarbonato, que protege a la lámpara y que a la vez modifica la distribución de la luz para evitar el deslumbramiento. El difusor también puede tener algún tratamiento para filtrar una frecuencia de luz indeseada: ultravioleta, infrarroja…
El alumbrado público es el sistema de iluminación que no es propiedad de ningún individuo o entidad privada, y cuyo objetivo es iluminar los espacios públicos urbanos, para mejorar la visibilidad, la seguridad y el bienestar de los ciudadanos, conductores, visitantes y demás usuarios.
Las tecnologías mas utilizadas para el alumbrado público son las farolas de vapor de sodio, vapor de mercurio o halogenuros metálicos, aunque están siendo desplazadas rápidamente por las ventajas que aportan las farolas LED.
Tipos de farolas urbanas
J. Farolas viarias. Este tipo de farolas están diseñadas específicamente para la iluminación de grandes espacios, como avenidas, glorietas y rotondas, autopistas, autovías y carreteras, grandes áreas de aparcamiento, aeropuertos, estaciones y puertos,… Su principal función es ofrecer un elevado nivel de iluminación que garantice la seguridad vial, una larga vida útil y un bajo consumo energético. El alto rendimiento de las farolas viarias LED permite instalarlas a una gran altura, superior a los 12 metros, lo que posibilita iluminar una mayor superficie y por lo tanto distanciar más las luminarias entre si y reducir el número total de farolas.
Las farolas de alumbrado público Coreline Malaga y Ledinaire StreetLight de Philips se han diseñado para la iluminación viaria y residencial, aportando un excelente rendimiento y eficiencia lumínica, proporcionando un ahorro del 50% en comparación con las farolas SON-T a las que sustituyen.
K. Farolas decorativas urbanas. Este tipo de farolas no sólo han de proporcionar una óptima iluminación, además se tienen que adaptar estéticamente a los diferentes espacios públicos de los municipios. En los centros históricos protegidos habrá que optar por farolas de diseño clásico, acordes con los edificios y monumentos circundantes, mientras que en los barrios y plazas de nueva construcción se podrán utilizar diseños más modernos e innovadores. Las farolas decorativas urbanas cumplen una función estética además de funcional, pueden considerarse parte del mobiliario urbano y como tales realzan y embellecen los espacios donde se instalan.
L. Farolas solares. El enorme auge de la iluminación LED y su bajo consumo energético han permitido el desarrollo de soluciones de iluminación solar para farolas de alumbrado público. Este tipo de farolas urbanas están dotadas de paneles solares, que captan la radiación solar durante el día, la almacenan en baterías y la utilizan durante la noche para iluminar. Además de ofrecer un ahorro energético del 100%, su instalación es muy sencilla, ya que no necesitan cableado ni conexión a la red municipal, lo que las convierte en la mejor solución para zonas aisladas o de difícil acceso.
La gran complejidad que tiene iluminar desde un pequeño pueblo hasta una gran ciudad implica diseñar soluciones de iluminación muy versátiles, que se puedan adaptar a las múltiples necesidades y los variados entornos del alumbrado urbano. A continuación mostramos los tipos de instalación de farolas públicas más utilizados:
Farolas en columna
Este es el tipo de instalación más común. Se utiliza una columna para ubicar las farolas urbanas a la altura que se necesite. La altura de montaje dependerá de las necesidades de cada espacio. Las farolas decorativas urbanas se instalan a una altura de entre 3,5 y 5 metros, mientras que las farolas viarias se instalan a una altura que va desde los 8 hasta más de 16 metros.
A. Post-top. Se denomina post-top cuando la luminaria se instala en la parte superior de una columna recta. Este tipo de instalación también se define coloquialmente como “pinchada” sobre la columna.
B. A brazo. Cuando necesitamos separar la luminaria de la columna, por ejemplo para iluminar una calzada, o cuando necesitamos instalar varias luminarias en una única columna se utilizan los brazos. La instalación de la luminaria en el brazo puede ser, a su vez, con montaje post-top, lateral o suspendida.
C. En columna curvada. Este tipo de instalación es cada vez menos frecuente. Consiste en una columna que termina haciendo una curva a la altura en que se instala la luminaria, para separar esta del eje central de la columna. La gran ventaja de este tipo de instalación es que es más sencilla y económica, aunque se destina a lugares donde el factor estético no es de gran relevancia.
Farolas a muro
Este tipo de instalación también es bastante frecuente, especialmente en los centros urbanos de las poblaciones, donde no hay mucho espacio o no es posible colocar una columna. En la instalación de una farola a muro se emplean brazos, para separar las luminarias de las fachadas de los edificios y pueden ser de montaje post-top, lateral o suspendido.
Farolas en catenaria
La instalación de farolas públicas en catenaria consiste en utilizar un cable de sujeción, anclado entre dos puntos, en el centro del cual se suspende una luminaria. A través de este cable pasa también la alimentación eléctrica de la farola. La instalación en catenaria se utiliza en calles estrechas, donde un único punto de luz es suficiente para aportar los niveles de iluminación adecuados.
Como has podido comprobar el alumbrado público es muy amplio y tiene unas características propias. Los municipios se enfrentan a múltiples retos para dotar a sus espacios de la mejor iluminación, con el menor consumo energético posible y respetando la exigente normativa vigente.
Philips, líder mundial en iluminación, dispone de un amplio catálogo de farolas para alumbrado público con las que cubrir todas las necesidades de la iluminación urbana profesional.